26. jul., 2016

Texto

Habilitación de la parada Km. 48                

La gestión para construir un apeadero en el Km. 48 del ramal Victoria-Pergamino, comenzó en el año 1940, cuando, un grupo de vecinos del antiguo Cuartel Rural IX del Partido del Pilar, inició las tratativas con las autoridades ferroviarias para lograr el cometido propuesto, sin conseguirse en aquel momento acuerdo alguno. Casi veinte años más tarde, con igual finalidad se constituyó la Junta Vecinal Pro-Construcción Apeadero Km. 48, creada el 11 de octubre de 1959, entidad responsable de realizar la obra "por administración": es decir que la Junta se hacía cargo de la compra de materiales y personal especializado del ferrocarril tendría la conducción técnica de la obra.

Para adquirir los materiales se programaron varias actividades sociales como asados, kerméses, rifas, etc. Se aceptaron donaciones en dinero como en especies (ladrillos, cal, arena, cemento), mientras que la mano de obra fue aportada voluntariamente por los vecinos del lugar.

Tiempo después, las señoras Juana Beliera y Celia Portillo Beliera de Olivera y el señor Humberto Beliera, en carácter de propietarios de las tierras contiguas al ferrocarril, donaron una fracción de 50 metros de ancho por 700 metros de largo, para la construcción de la parada ferroviaria y futura playa de maniobras, donación firmada el 9 de enero de 1960.

Al año de iniciado el proyecto ya estaba terminado el apeadero con su correspondiente plataforma. El 19 de diciembre de 1960, las autoridades ferroviarias autorizan y habilitan la parada ferroviaria Km. 48, denominación que en principio tomó el poblado que se iba formando en sus alrededores.

La ejecución de nuevos loteos sobre los campos de las familias Nieto, Cippitelli y Beliera, permitió el asentamiento de nuevos grupos familiares, cuya consecuencia directa fue un rápido crecimiento demográfico de toda la zona.

Asignación del nombre de Maquinista Savio

La conveniencia de asignarle un nombre, que identifique a la parada Km. 48, fue propuesta por la Junta Vecinal al Presidente de Ferrocarriles Argentinos. Este, mediante la Resolución Nº 1938/68, impuso el nombre de "Maquinista Savio" a la parada del Km. 48, del ramal Victoria-Pergamino, en cuyos considerándos se destacaba que dicha designación recaía en honor a  un abnegado trabajador de riel, conductor, durante muchos años, de la locomotora "191", más conocida como "La Emperatriz", verdadera joya de orfebrería, reconocida en todos los ramales ferroviarios del país.

La imposición del nombre de Maquinista Savio (Ver foto), se realizó en una ceremonia celebrada el 24 de marzo de 1968, presidida por el Vicepresidente de Ferrocarriles Argentinos Gral. de Brigada Tomás José Caballero y altas autoridades ferroviarias. También se encontraban presentes el Intendente Municipal del Partido de Escobar, Ingeniero Alberto Ferrari Marín y autoridades municipales, miembros de la Junta Vecinal Pro-Parada Km. 48. y, una guardia de honor a cargo de una compañía del Regimiento de Granaderos a Caballo Gral. José de San Martín y banda (Ver foto de arriba, donde se observa a la izquierda al Intendente de Escobar, ingeniero Alberto Ferrari Marín).

Creación de la Delegación Municipal

Finalmente, a catorce años de haberse habilitado la parada ferroviaria, que permitió la formación del pueblo y a seis años de la imposición del nombre, se creó, mediante Ordenanza Municipal la Subdelegación de Maquinista Savio, firmada el 5 de junio de 1974, por el entonces Intendente Municipal Fernando Argentino Valle. En la ordenanza se asignaron los siguientes límites: “Por el sudeste la línea que sigue el curso del arroyo Garín. Por el noreste la calle Pueyrredón y su continuación Rivadavia, hasta llegar al arroyo Escobar, límite noroeste y por el sudoeste la calle Florencio Sánchez y su continuación Pedro Nieto, límite con el Partido del Pilar.

Escuela Nº 24, “Comandante Piedrabuena”, génesis del pueblo

La historia de esta escuela, habilitada el 17 de junio de 1957, hoy fuera de los límites del Partido de Escobar, es rica en contenidos históricos que partieron de un grupo de vecinos, quienes en las postrimerías de los años cincuenta, con el afán de crear una escuela rural, sin saberlo estaban forjando las bases de algo mucho mayor: el nacimiento de un pueblo, que por esos caprichos de la política hoy esta dividido en dos.

Este establecimiento educacional fue la piedra fundamental, que permitió la habilitación de la parada ferroviaria, la realización los primeros loteos, la repavimentación de la Ruta 2014 (hoy Ruta 26), construcción del templo parroquial, el destacamento policial.

La primera Comisión Vecinal Proescuela estaba integrada por Juan Pablo Beliera Bussio (nota 1) como presidente: Feliz Baloy como vicepresidente, Pedro Nieto como secretario, Mauricio Sans como prosecretario, Mario Gómez como tesorero, Sebastián Vera como protesorero y Ernesto Maranguina, Miguel Kulesas, José Pisarno, Martín González, Fedora M. de Vera, Rosa Sánchez de Gómez como vocales.

Nota 1: Juan Pablo Beliera Bussio, más conocido como “Pepe Beliera”, ocupó luego una banca de concejal integrando el primer Concejo Deliberante del recién creado Partido de Escobar en el año 1960.

La Ruta 2.014 (Hoy Ruta 26)

Este antiguo camino vecinal, más conocido como “el camino viejo al Pilar”, fue mejorado alrededor del año 1942 con la colocación de una fina capa de asfalto negro. En el año 1958, las Comisión Vecinal Pro-Escuela y la Comisión Pro-Apeadero Km. 48, gestionaron ante el diputado provincial Edilfredo Ameghino de Escobar, la pavimentación de la Ruta 2014 (hoy Ruta 26), totalmente deteriorada en ese momento, para permitir un fácil acceso a la escuela rural recién habilitada. El asfalto fue proyectado con un ancho de siete metros, aunque, por exigencias de presupuesto se lo restringió a cinco metros. La primer línea de colectivos que la recorrió fue la 175 (luego 203), empresa "La Independencia", que lo hacia desde el Canal San Fernando hasta Pilar y vuelta.